Neumonía en terneros: ¿Por qué se debe poner atención?

La neumonía en terneros es una de las formas del síndrome respiratorio bovino en el que los pulmones están afectados y los terneros padecen una enfermedad respiratoria grave.

¿Qué es la neumonía en terneros?

Se habla de neumonía de los terneros cuando se produce una infección de los pulmones en terneros de corta edad. La neumonía tiene características propias en cada grupo de edad y sistema productivo, y así se distingue entre neumonía de los terneros en:

• Terneras lactantes de recría de explotaciones lecheras menores de tres meses.

• Terneras de recría de explotaciones carne de vacas nodrizas cerca de las tres semanas de edad.

• Terneros de cebo desde el destete hasta que alcanzan el peso de sacrificio.

¿Cuáles son las causas de la neumonía de los terneros?

El síndrome respiratorio bovino es una enfermedad muy compleja. Las causas son muy variadas y actúan en combinación, aunque para entenderlas mejor se clasifican en tres grupos:

• Causas relacionadas con el ternero: la anatomía respiratoria de los bovinos los predispone a sufrir enfermedades respiratorias. Además, hay otros factores que contribuyen a que sean más sensibles a desarrollar neumonía:

  • La edad: los terneros jóvenes tienen un sistema inmunitario poco desarrollado.

  • La toma de calostro: los terneros nacen sin anticuerpos porque la placenta ejerce de barrera. La toma correcta de calostro inmediatamente después del nacimiento es fundamental para protegerlos.

  • El destete: el momento del destete es muy estresante, sobre todo si va unido a cambios de alimentación, de alojamiento y reagrupamiento demasiado bruscos.

• Causas relacionadas con el medio ambiente: el estrés es el peor factor de riesgo que influye en el desarrollo de neumonías en terneros. Ejerce un efecto negativo sobre el sistema inmunitario y hace que sean más vulnerables a las infecciones. El origen del estrés puede ser muy variado:

  • Transporte: el movimiento, el hacinamiento, los cambios de temperatura y de ambiente, el hambre y la sed provocan que los animales sufran mucho estrés.

  • Reagrupamiento y alojamiento: al formar lotes en la propia granja, o al formar nuevos grupos sociales cuando llegan al cebadero, los animales necesitan volver a construir sus jerarquías. Si el alojamiento no es adecuado y el espacio es insuficiente, el riesgo de neumonía se dispara.

  • Clima: el estrés por frío y por calor influye en la aparición de neumonías.

  • Alimentación: los cambios bruscos en la dieta o los desequilibrios nutricionales, especialmente la acidosis ruminal.

  • Otras enfermedades: los terneros que ya tienen otras enfermedades, como parásitos, diarrea y coccidiosis, padecen más casos de neumonía.

• Microorganismos patógenos: en primer lugar, actúa un virus, que altera las vías respiratorias altas, provoca inmunosupresión o incluso puede afectar a los pulmones. Los más habituales son el virus de la rinotraqueítis infecciosa bovina, la diarrea vírica bovina, el virus respiratorio sincitial bovino o el virus de la parainfluenza bovina. De manera simultánea o secuencial, las bacterias colonizan el aparato respiratorio, especialmente los pulmones, provocando una neumonía: Mannheimia haemolytica, Pasteurella multocida e Histophilus somni, entre otras.

¿Cómo se puede saber si un ternero tiene neumonía?

Los terneros con neumonía muestran estos síntomas:

• Están deprimidos, dejan de comer y pierden condición corporal.

• Tienen fiebre.

• Les cuesta respirar, adoptando una postura ortopneica.

• Tienen secreción nasal, tos y conjuntivitis.

El diagnóstico se debe confirmar con una exploración clínica por parte del veterinario, toma de muestras para determinar en el laboratorio los microorganismos presentes y su sensibilidad a los antibióticos, y realización de la necropsia en los animales que hayan muerto en la explotación.

Tratamiento de la neumonía de los terneros

La neumonía en terneros se trata con antibióticos y antiinflamatorios, eligiendo los más adecuados en función de la bacteria aislada, su sensibilidad, y la vía de administración y la dosis ajustada a la edad, el peso y el estado del animal, siguiendo las buenas prácticas del uso de antibióticos en las granjas.

En la neumonía de los terneros, lo más importante es adoptar unas buenas medidas de manejo y una vigilancia constante para actuar lo antes posible si se detecta un brote.