El sector ovino español es clave en nuestra economía: además de ser una actividad tradicional, supone una importante fuente de riqueza produciendo alimentos de alta calidad, cuida del medio ambiente y ayuda a fijar población en el medio rural. Sin embargo, la ganadería ovina atraviesa desde hace décadas numerosas dificultades que la convierten en una actividad con escasa rentabilidad y muchas dificultades para lograr el relevo generacional.
A pesar de todo, la profesión ganadera es vocacional y se suele transmitir de una generación a otra para conservar la tradición, aunque últimamente hay jóvenes ganaderos que se animan a iniciar un negocio con una explotación ovina porque les ofrece un estilo de vida que les resulta atractivo, por lo que estos profesionales suponen una esperanza para el sector.
Francisco Conejo Muñoz es un ganadero de ovino que nos ofrece su testimonio para conocer los retos a los que se enfrenta como profesional. Dirige junto con su mujer la explotación Hermanos Conejo en Villadendimio (Zamora), que comenzó en el año 2000 junto con su hermano y 350 ovejas. Tras crecer a 600 cabezas, en 2011 su mujer tomó el relevo de su hermano y continuaron hasta hoy, con 1200 ovejas.
A pesar de haber hecho crecer su explotación en estas décadas de recorrido, Francisco nos explica las dificultades que atraviesa para sacar adelante su negocio.
Francisco Conejo explica que su principal dificultad para continuar con su actividad es la escasez de mano de obra. Hay falta de profesionales que se quieran dedicar a la ganadería, y las pocas personas que se encuentran que acepten los puestos de trabajo son extranjeros, con las barreras que implican un idioma y una cultura diferentes. Al final, la convivencia y el entendimiento consiguen que el trabajo salga adelante.
Según Francisco Conejo, otro de los principales problemas de las explotaciones de ovino son los elevados costes de las materias primas, sobre todo las que forman parte de la alimentación. Para abaratar estos costes, la solución que encuentran muchos ganaderos es asociarse y realizar compras conjuntas.
Francisco explica que la planificación reproductiva es un factor clave para conseguir un funcionamiento óptimo de la granja. Además de la toma de datos, el manejo reproductivo implica tomar decisiones sobre la estrategia reproductiva ideal para la explotación, el uso de implantes y esponjas vaginales, la introducción de los machos y el análisis de los datos reproductivos para corregir los efectos de las causas de fallo reproductivo en los animales.
Ceva Salud Animal es un aliado de los ganaderos, ayudando a planificar las cubriciones del rebaño con el asesoramiento veterinario. Además de desarrollar tratamientos hormonales que corrigen los problemas reproductivos, Ceva contribuye al desarrollo de la ganadería investigando y sacando al mercado nuevas vacunas registradas para ovino, que actualmente son muy escasas en estos animales.