La lana de oveja es un producto que históricamente tuvo una enorme importancia como materia prima textil. Gracias a la lana de oveja se construyó un notable entramado social y económico durante trescientos años, especialmente en España, donde se explota sobre todo la raza merina.
Con el desarrollo de las fibras sintéticas el comercio de la lana sufrió un declive hasta la actualidad, a pesar de que se están desarrollando proyectos de recuperación de la lana.
Las técnicas de esquileo o esquilado de las ovejas son muy antiguas, aunque se han perfeccionado con la tecnología para optimizar el trabajo y aprovechar al máximo la lana.
El método tradicional era el esquileo a tijera, que se realiza a mano. La oveja se coloca en el suelo, y el pastor o el esquilador utiliza unas tijeras de esquileo. Era un trabajo de mucha exigencia física y muy lento, pero ahora se emplean máquinas esquiladoras que permiten ganar tiempo.
El proceso completo del esquileo sigue estos pasos:
Los esquiladores necesitan estar bien formados para saber manejar las ovejas y evitar hacerles lesiones en la piel o dañar la lana.
Las ovejas viven a la intemperie la mayor parte del tiempo; por eso se acumula suciedad en la lana, que después se debe eliminar al procesarla para mejorar su calidad.
Esta es la suciedad más típica que se encuentra en la lana esquilada:
El procesado artesanal de la lana era una tarea cotidiana en nuestro medio rural, pero ha caído en desuso por ser demasiado laborioso e ineficiente. Actualmente, el lavado de la lana se realiza en lavaderos industriales mecanizados, que procesan grandes cantidades de lana siguiendo un procedimiento:
La calidad de la lana se valora por su calibre y su longitud, ya que determina el procesado posterior. La lana más fina (como la de la raza Merina) es la más apreciada.
Sin embargo, la suciedad en la lana es un factor que baja su precio, ya que cuantas más impurezas lleve adheridas el vellón, supone un mayor gasto durante la preparación de la lana, además de mayores pérdidas de producto. Por eso, es interesante evitar que las ovejas estén sucias y realizar el esquileo en zonas limpias.
Australia produce lana de oveja Merina, y es común realizar el esquileo en naves limpias para evitar la contaminación de la lana. La clasificación y separación de la lana se realiza en el momento, en un proceso automatizado.