La venta de ovejas en España tiene lugar en lonjas en ferias ganaderas o mediante canales alternativos, como pueden ser el boca a boca, los anuncios en diferentes medios o por internet. Los motivos para comprar una o varias ovejas son múltiples: empezar una nueva explotación, reemplazar animales eliminados por campañas de erradicación de enfermedades, ampliar o mejorar genéticamente una granja ya existente, criar una raza en particular…
A la hora de buscar precios de ovejas, no debemos confundir las hembras “para vida”, es decir, jóvenes, en buen estado de salud y con potencial reproductor y productor, con las hembras de desvieje. Los animales para vida, tanto machos como hembras, se venden por unidad, mientras que los animales de desvieje, cuyo destino es el matadero, se venden por kg de peso vivo.
En páginas de venta online, como Agroanuncios o Milanuncios, podemos encontrar cientos de anuncios de pastores que venden algunos de sus animales, parte o todo su rebaño. Uno de los atractivos principales que aumentan el valor de venta de un rebaño de hembras es que haya un elevado porcentaje que esté gestante, para así empezar a obtener corderos y recuperar la inversión más rápidamente, acortando el periodo improductivo.
En nuestro país, las ovejas de leche son más caras que las de carne o mixtas y, por lo general, las razas extranjeras son más caras que las nacionales. Por ejemplo, los ejemplares de Assaf se venden por 100-120 €, mientras que los de Rasa Aragonesa valen entre 70 y 100 €. Además, si están inscritas en el árbol genealógico podríamos decir que tienen “pedigrí”, por lo que estos especímenes también verán su valor aumentado.
Podemos consultar los precios en las lonjas españolas, que normalmente se publican cada semana. Veamos, por ejemplo, en el Mercado de Talavera de la Reina, cuáles son los precios más recientes (semana 15/05/2023) de venta de ovejas y cabras para vida:
Oveja Manchega: 90 €
Oveja Merina: 88 €
Oveja Talaverana: 70 €
Macho reproductor Manchego: 180 €
Macho reproductor Talaverano: 100 €
Cabras adultas (varias razas): 105 €
Chiva próxima a su primer parto: 140 €
En agosto de 2020 se vendió el espécimen ovino que, hasta el día de hoy, ostenta el récord de ser el más caro de la historia. Se trataba de un cordero de seis meses de la raza cárnica Texel, y se vendió en una subasta en Escocia. Para comprarlo, tuvieron que asociarse tres ganaderos con la intención de usarlo como semental cuando creciera, tanto en sus propias ganaderías como para vender su semen a compradores internacionales. El precio que pagaron alcanzó la friolera de 490.000 dólares (416.000 €).
Este ovino desbancó al anterior récord mundial, otro macho de la misma raza (la genética Texel es muy valorada como mejorante, ya que sus cualidades de tipología cárnica permiten obtener corderos con un alto porcentaje de costillar magro muy apreciado), también vendido en Escocia. Fue en 2009, y su precio de venta fue de 376.200 dólares (263.340 €). Este último derrocó a la que había sido la oveja más cara de la historia durante 20 años, una Merina Australiana.
La oveja Texel es una raza muy apreciada por su conformación cárnica, y alcanza altos precios en las subastas.
Otra raza de oveja, quizá desconocida en España, que alcanza precios desorbitados es la Ladoum senegalesa. Esta gran raza de pelo se considera en este país un símbolo de riqueza y estatus, y no se usan para el consumo de carne, sino que participan en concursos de belleza televisados. Poseer uno de estos especímenes, especialmente un macho, es algo muy deseado por los senegaleses adinerados, que llegan a pagar decenas de miles de dólares por un ejemplar.
Las cabritas enanas últimamente se han puesto de moda en muchos países como mascota, debido a su carácter juguetón y cariñoso y a un carácter similar al de los perros. En España, donde no es tan común tener casa con jardín, no es tan habitual, pero cada vez se ve más. En internet estos animales se pueden encontrar por precios que oscilan entre los 50 y los 90 €. A quien desee embarcarse en la aventura de tener una cabra como animal de compañía, le recomendamos que se informe detenidamente en fuentes especializadas o en tiendas de animales donde le puedan aconsejar cómo mantenerla, alimentarla, qué necesidades especiales puede tener, etc.
Las cabras enanas son pequeños rumiantes que mucha gente en el mundo tiene como mascota.
En caso de adquirir uno de estos animales para tenerlo como mascota es importante tener en cuenta la legislación aplicable en cada comunidad autónoma, provincia e incluso municipio: en algunos casos se considerarán, sin excepción, animales de producción, por lo que puede que debas dar de alta tu terreno como corral doméstico; en otros casos podrán considerarse animales de compañía, y estarán sujetos a diferentes regulaciones.
En la normativa nacional más reciente (Ley 7/2023 de protección de los derechos y el bienestar de los animales), se menciona que “Los animales de producción solo se considerarán animales de compañía en el supuesto de que, perdiendo su fin productivo, el propietario decidiera inscribirlo como animal de compañía en el Registro de Animales de Compañía.” En caso de inscribirse como animal de compañía, quedaría prohibido según el capítulo II, artículo 27 “Emplear animales de compañía para el consumo humano.”
Los medicamentos que se pueden administrar a un animal “de compañía” y a un animal “de producción” son muy distintos, siempre que no esté garantizado que no dejen residuos en su carne, leche o huevos. Por tanto, si tenemos como mascota una cabra enana (o cualquier otro animal que tradicionalmente se considera de producción, como un cerdo, un conejo o un pato) es ilegal comernos sus productos y, evidentemente, su carne tras su muerte. Se considerará una infracción muy grave, con multas desde 50.001 hasta 200.000 €.