¿Para qué sirven los seguros agrarios? ¿Son obligatorios?

La ganadería y la agricultura son actividades arriesgadas, altamente dependientes de las condiciones ambientales, especialmente climatológicas y aquellas relacionadas con plagas o brotes de enfermedades que se cobran la vida de los animales o, en caso de existir un plan de erradicación, a veces suponen su sacrificio obligatorio. Para disminuir el impacto de estas eventualidades sobre la sostenibilidad económica de las explotaciones existen los seguros agrarios.

El sistema español de seguros agrarios está fuertemente subvencionado

Los seguros agrarios o agropecuarios son seguros no obligatorios que cubren ciertos riesgos frecuentes de la actividad agroganadera que, en caso de ocurrir, provocan un grave impacto sobre la actividad económica de las empresas del sector, ya sea agrícola, ganadera, o combinada.

Desde hace más de 4 décadas, en España el sistema de seguros agrarios es público-privado. La administración pública destina cada año muchos millones de euros para ayudar a los ganaderos y agricultores a estar protegidos frente a situaciones desfavorables que escapan a su control. En este sistema participan varios organismos:

• La Entidad Estatal de Seguros Agrarios (ENESA), dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, es la mayor autoridad. Gestiona la creación de planes nacionales, la concesión de subvenciones del gobierno central, la colaboración con las comunidades autónomas y la normativa sobre la que las aseguradoras privadas estructuran los seguros.
• Las comunidades autónomas tienen competencias compartidas sobre la concesión de subvenciones a nivel autonómico y trabajan conjuntamente con ENESA en la definición de las condiciones técnicas y los requisitos del seguro, los partes y los siniestros.
• Las aseguradoras privadas, que son las que ofrecen los diferentes seguros, basados en la legislación nacional. La Agrupación Española de Entidades Aseguradoras de los Seguros Agrarios Combinados S. A. (AGROSEGURO) es un organismo gestor que actúa de intermediario entre la parte pública, la parte privada y los asegurados.
• El Consorcio de Compensación de Seguros, dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, es una entidad estatal que asume, en lugar de la compañía aseguradora, los costes del pago de las indemnizaciones en caso de que ocurra una catástrofe o “riesgo extraordinario”: fenómenos naturales o derivados de hechos de incidencia política o social.

¿Qué tipos de seguros puedo contratar?

Seguros ganaderos o pecuarios hay de varios tipos:

• Seguros sobre la explotación, sus animales y su producción, con coberturas básicas y adicionales dependientes de la especie y tipo de explotación. En el caso de los rumiantes, las coberturas garantizadas varían dependiendo de si se trata de explotaciones de bovino reproductor/lechero, explotaciones de cebo de terneros o explotaciones de ovino y caprino.
• Seguro de compensación por pérdida de pastos. Cubre el aumento de los gastos de alimentación en aquellas explotaciones extensivas de ganado bovino, ovino, caprino o equino, en caso de que la producción vegetal de la zona se vea dañada o disminuida respecto a su crecimiento habitual, o en caso de que los animales se vean privados del acceso a sus pastos habituales, generalmente por motivos sanitarios.
• Seguro de cobertura de los gastos de retirada y destrucción de animales muertos en la explotación. Es particular el caso de explotaciones ovinas y caprinas ubicadas en zonas de protección para la alimentación de especies necrófagas (ZPAEN), que tienen condiciones especiales y precios reducidos para la retirada y destrucción de cadáveres en caso de sacrificio obligatorio.

Fuente: MAPA y Agroseguros

Muchos agricultores están asegurados, pero no tantos ganaderos

Como hemos visto, el coste de las pólizas de los seguros agrarios puede estar subvencionado por partida doble, estatal y autonómica. El conjunto de estas subvenciones no puede superar un máximo, que en el ganado bovino es del 51% del precio de la prima (61% en caso de ser un ganadero joven) y en el ganado ovino y caprino es del 61% (71% para los ganaderos jóvenes). En Canarias el máximo es mayor.

En realidad, el porcentaje subvencionado a nivel nacional de los seguros agrarios es de un 40% de media, aunque la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) denunció que, entre 2015 y 2019, los agricultores y ganaderos tuvieron que hacer frente a un aumento del precio final del seguro del 20-80%. Esta asociación denuncia que las políticas de aumento de las primas van en contra del principio de solidaridad.

Debido al aumento de las catástrofes meteorológicas relacionadas con el cambio climático, cada año son más los ganaderos que, pese a la subida del precio de las pólizas, deciden contratar un seguro agrario. Durante el pasado año 2022 se aseguraron 416,5 millones de animales, un 26,8% más que en 2021.

El seguro sobre los animales supone que el ganadero reciba una compensación económica en caso de que mueran o deje de ser productivos. La cobertura de los gastos de retirada y destrucción de animales muertos en la explotación supone tener contratado otro seguro, que puede integrarse en el primero.