Numerosos estudios han evidenciado la asociación de la Fiebre Q con problemas reproductivos en las granjas de vacuno y el impacto de esta enfermedad en el rebaño.
Antonio Jiménez, técnico de vacuno en Ceva Salud Animal, describe que la Fiebre Q es causada por Coxiella burnetii, una bacteria intracelular que infecta a los macrófagos en el endometrio y a los trofoblastos en la placenta. Esta infección resulta en varios problemas reproductivos significativos en las explotaciones ganaderas, incluyendo mayores tasas de retención de placenta, aumento de los casos de endometritis, pérdidas de gestación y disminución de la fertilidad, con peores tasas de concepción.
Jiménez aclara que el diagnóstico clínico de Fiebre Q se basa en la detección de síntomas compatibles, como el aumento de casos de retención de placenta y endometritis, pérdidas de gestación y baja fertilidad.
Para confirmar la infección en el laboratorio se suele emplear la técnica ELISA para detectar anticuerpos, a partir de muestras tomadas de animales con problemas reproductivos. Una seroconversión significativa indica la circulación activa de la enfermedad en el rebaño. Además, se puede utilizar la técnica de PCR para examinar muestras de tanque en explotaciones lecheras o, en caso de abortos, tomando una muestra de hisopo vaginal en la primera semana tras el aborto o de tejidos, como la placenta, para detectar la presencia de la bacteria.
Antonio Jiménez explica que la vacuna Coxevac muestra su eficacia a dos niveles. Por un lado, ha demostrado en estudios científicos que es capaz de mejorar la tasa de concepción a la primera inseminación y en reducir los días abiertos –entre 14 y 20 días abiertos– lo cual representa un ahorro económico considerable para las explotaciones.
Por otro lado, a medio plazo, la vacuna también reduce significativamente la excreción de la bacteria en la granja, ayudando a controlar y eliminar la enfermedad.
Jiménez recuerda la importancia de manejar adecuadamente la vacuna, conservándola correctamente y aplicándola según las instrucciones de la ficha técnica para maximizar su eficacia.
Además, señala la relevancia de realizar un diagnóstico diferencial preciso para excluir otros factores o enfermedades infecciosas que puedan afectar a la reproducción, asegurando así que los esfuerzos estén orientados hacia la causa del problema para conseguir efectos a nivel clínico.
Este enfoque integral mejora los parámetros reproductivos y contribuye a la sostenibilidad económica de las explotaciones ganaderas al reducir las pérdidas asociadas a problemas reproductivos y pérdidas de productividad.
https://ruminants.ceva.pro/es/coxielosis
https://vacapinta.com/media/files/fichero/vp022_saludanimal_fiebreq_castellano.pdf
https://ruminants.ceva.pro/es/retorno-de-la-inversion-de-la-vacunacion-contra-la-fiebre-q