La alimentación del ganado es uno de los factores más importantes en cualquier granja, no sólo porque de ella depende el bienestar del animal o la calidad del producto a obtener, sino porque supone uno de los principales costes de la explotación y, en función de cómo se administre el alimento, también del trabajo a realizar.
El sistema más tradicional de alimentar al ganado rumiante es dar una ración de comida dos o tres veces al día, racionando de manera individual los componentes, como forrajes, piensos, etc. Este tipo de alimentación resulta poco homogénea (los animales pueden comer más de una ración que de otra, o elegir más un producto y dejar otro); menos saludable para el animal y más trabajosa para el ganadero.
Por eso, una de las principales innovaciones en la alimentación de animales rumiantes en los últimos años han sido los carros de alimentación, también conocidos como mezcladores o “unifeed” (alimentación única).
Estos equipos se caracterizan porque permiten pesar, picar y mezclar diferentes ingredientes (forrajes y pienso, principalmente) en función de la dieta que precise el ganado. Posteriormente, esa mezcla se distribuye entre los animales, quienes se alimentan de una forma homogénea y única de un producto que ya contiene todo lo que la res precisa.
El picado de los ingredientes se puede regular, normalmente, en función del tamaño de la fibra que requiera el ganado. Para conseguir una mezcla adecuada es conveniente incorporar primero los ingredientes secos más pequeños (concentrados), luego el heno y después lo ensilados, pulpas o ingredientes húmedos.
Son varias las ventajas de los carros de alimentación, mezcladores o unifeed. Entre ellas, se pueden destacar varias:
-el picado de los ingredientes al tamaño que precisa el animal, lo que le permite una mayor ingestión total y un mejor funcionamiento del rumen, aspectos que benefician la salud y, por tanto, la productividad de la res.
-el uso de estas máquinas reduce la mano de obra necesaria para alimentar al rebaño, ya que tanto la preparación como la distribución es relativamente sencilla y cómoda.
-el mezclador y el picado permiten incorporar en la dieta de los animales nuevas materias primas o subproductos que antes resultaba más complejo suministrar por su propio manejo en sí o porque el ganado los rechazaba por el sabor o textura.
-la flexibilidad en la formulación de la alimentación es mayor, puesto que en los carros se pueden combinar diferentes componentes, y tener en cuenta tanto su valor nutritivo como su coste económico.
Como desventaja, quizá la única es el alto coste de este los carros o mezcladores unifeed, por ello es preciso seleccionarlos bien antes de adquirirlos.
Los carros de alimentación pueden ser fijos, autopropulsados o remolcados. Todos cuentan con un dispositivo electrónico para pesar los ingredientes y una memoria para almacenar las raciones específicas.
Asimismo, los carros pueden ser horizontales o verticales (en función de la posición de los rotores de las chuchillas y sinfines). Y en función de la distribución, pueden tener una apertura o dos, y los más complejos cuentan con una cinta distribuidora que deposita el contenido en el comedero.
Hay muchos tipos de carros y mezcladores, por ello es recomendable analizar bien todas las posibilidades que antes de decidirse por la adquisición de uno sería conveniente, si es posible, probarlo durante unos días o, en su defecto, visitar una granja similar para saber cómo funciona el que posee.